Anuncian remozamiento parque zooógico de Moca.

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image-2016-03-29Moca. El Patronato del parque zoológico y botánico de este municipio (Zoo-Moca) anunció hoy que trabaja en el reacondicionamiento de las diferentes aéreas de sus instalaciones con el fin de garantizar un mejor habitad para las especies animales y de la flora que habitan allí, y al mismo tiempo lograr disponer de un lugar de esparcimiento más adecuado para los visitantes.
Durante una rueda de prensa, el alcalde Remberto Cruz, presidente del Patronato, informó que desde el pasado octubre brigadas integradas por internos del Centro de Corrección y Rehabilitación La Isleta y de empleados del ayuntamiento, en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente, trabajan en la limpieza general y el la poda de árboles con el fin de eliminar malezas que afectan la vegetación del lugar.
“Actualmente estamos en los trabajos de construcción de jaulas con el fin de mejorar el hábitat de las especies, así como también elaborando un plan para mejorar la alimentación de los animales. En esos términos, ya se encuentran avanzados los espacios que acogerán avestruces y otras aves”, explicó Cruz.
En el parque también serán demolidas las aceras de los senderos, con la intención de mejorar el desplazamiento de los visitantes. También se trabaja en un área infantil, que incluirá juegos.
“El trabajo de recuperación del Zoo-Moca incluye la entrada principal con un mirador. Se pretende remozar las aceras exteriores e intervenir la cañada con el fin de reducir la contaminación producida por las aguas residuales”, explicó el funcionario.
El alcalde dijo que el Ministerio de Educación podrá aprovechar el Zoo-Moca para impartir aprendizaje sobre la zoología y la botánica.
El Zoo-Moca fue abierto en la década de los 80 bajo la gestión del entonces alcalde Rubén Lulo Gitte, quien quiso darle a Moca un espacio recreativo que fuera el orgullo de la provincia Espaillat.
Actualmente, recorrer sus instalaciones es doloroso. Muchos visitantes dicen que recordar lo que fue este lugar contrasta con lo que es hoy: todo se ve viejo, roto, descuidado. Poco queda del ayer porque ni siquiera los animales están bien.
La situación del lugar ha provocado que mermen los turistas. Los pocos que llegan los fines de semana pagan 25 pesos por persona.