SANTO DOMINGO. -La inesperada victoria de los Criollos de Caguas en la Serie del Caribe marca el final de los torneos caribeños 2016-17 y a la vez nos pone a esperar el otoño-invierno y nuestro torneo LIDOM 2017-18.
El inicio de los campos de entrenamientos de las Grandes Ligas a partir del martes 14 de este mes hace que se presenten comitivas de los seis equipos LIDOM a Arizona y Florida, donde los conjuntos nuestros tienen colocados una gran cantidad de jugadores.
Los viajes a los entrenamientos sirven para tener contacto con los diferentes ejecutivos de los equipos de Grandes Ligas y a la vez para recordar a sus muchachos que de nuevo se verán las caras en los entrenamientos nuestros a partir del mes de septiembre.
Algunos conjuntos tienen la resaca del torneo pasado, las frustraciones y triunfos para algunos. Esto pasa a un segundo plano a partir de ahora, pues todos inician desde cero contando desde hoy hasta algo más de ocho meses.
Los Tigres del Licey son los flamantes campeones de nuestra LIDOM. Es un conjunto que ha estado en tres de las últimas cuatro finales y ha conseguido dos títulos. Tienen como encomienda mantener su estructura con Junior Noboa a la cabeza gerencial y a la vez buscar un manager, recordando que Audo Vicente, el hombre de los tres campeonatos con equipos diferentes, finalizó como dirigente de los Toros del Este, por ende uno entiende que ha de quedarse en Romana, aunque en la LIDOM nunca se sabe.
Las Águilas alcanzaron la serie final, pero tendrán que fajarse desde hoy para borrar casi diez años sin conseguir un título. Manny Acta ha manifestado que ocupará su puesto de gerente y estará detrás de otro manager. Manny señaló que no está en ánimos de seguir ocupando los dos puestos. Con Acta y Chilote las Águilas no lograron el campeonato, sin embargo consiguieron la estabilidad de un conjunto que había presentado problemas los últimos años.
Para los Gigantes del Cibao la temporada pasada fue de estabilidad y crecimiento. Lograron jugosos contratos publicitarios, aumentó el seguimiento de los fanáticos, mientras la solidez de la franquicia cibaeña ha sido más que evidente. El gerente Ismael Cruz tuvo una destacada labor, en caso de seguir con los campeones nacionales 2014-15 tendrá que buscar un dirigente para el próximo torneo y mantener el núcleo del talento ofensivo criollo que ha sido de lo mejor en la LIDOM los últimos años.
Los Leones del Escogido siguen con el dúo de los hermanos Moisés y Luis Rojas-Alou. La temporada no fue la mejor para los Duros de Matar, sobretodo por no logra repetir el campeonato. Moisés es una máquina de trabajo, mantiene su estructura de siempre, con pocas variantes y el trabajo este año ha de duplicarse, conociendo todos al más exitoso gerente de nuestra liga en los últimos ocho años.
Los Toros del Este estarán pensando en clasificar y quizás avanzar más allá de un round robin, considerando que su última participación en serie final se remonta a la temporada 2010-11. Aunque no logró la clasificación el torneo pasado Stanley Javier hizo un buen trabajo en la vicepresidencia de operaciones o gerencia. Audo Vicente ha de seguir como dirigente de los Toros.
Las Estrellas orientales estarán en el medio centenario de su último título en la temporada de 1967-68. El pimentelense José Serra y su cuerpo técnico podrían casarse con la gloria si consiguen el tan esperado tercer campeonato para los orientales.
Todos los equipos arrancarán desde cero, en una temporada muerta que no lo es para los gerentes generales y equipos de operaciones. Se ve muy lejos octubre y la temporada 2017-18, mas la espera valdrá la pena.