Santiago. Residentes en los sectores El Ensueño, Nibaje y El Retiro I y II demandaron hoy de las autoridades de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), resolver el problema que desde hace varios meses se presenta con el servicio de agua, la cual está llegando sucia y no apta para el consumo humano en los hogares.Juan Molina expresó que en los últimos días en su vivienda ha sido imposible lavar la ropa ni hacer otros quehaceres del hogar, debido a que el agua está llegando sucia.
“Durante el día el agua está llegando que parece chocolate de tan sucia. Como se podrá comprender, así no es posible hacer las tareas de la casa. Y peor aún, uno entra a la ducha y en vez de bañarse se ensucia más. Aquí hemos tenido que comprar agua de botellón para bañarnos, cepillar los dientes y cocinar”, dijo Molina.
Explicó que está cansado de llamar a Coraasan para reportar el problema y allí lo que siempre le dicen es que la compañía está haciendo algunas labores en las tuberías.
“Si sucede un día o dos o hasta en una semana, eso no importa porque es para mejorar el servicio. Pero este problema tiene varios meses y en Coraasan cuando he llamado solo dicen que no saben cuando se resolverá”, expresó.
El señor manifestó que en servicio al cliente le recomendaron que cuando el agua llega sucia debe dejar abierta la llave por varios minutos hasta que se limpie, lo cual no sucede a pensar de qué dura hasta 15 minutos botando agua.
“Ellos mandan a hacer uso racional del liquido, pero se contradicen cuando a la vez mandar a dejar la llave abierta”, cuestionó.
La vecina de Molina, quien pidió reserva de su nombre, dijo que el agua sucia que llega a su casa está afectando su salud y la de sus tres hijos menores.
“A veces mis hijos y yo, tenemos picazón en el cuerpo y todo eso es provocado por esa agua sucia con la que nos estamos bañando”, sostuvo la señora.
Agregó que, a pesar de que Coraasan no toma medidas para garantizar que el agua llegue limpia a los hogares, hace recientemente hizo un aumento de 5% a la factura del servicio. “Ahora estamos peor, una agua sucia y cara, eso es un desastre”, expresó la mujer.