Puerto Príncipe.- Una vez más miles de haitianos están convocados este jueves a movilizarse contra el Gobierno, que en los últimos meses ha experimentado una de sus mayores crisis sociopolíticas.
Plataformas opositoras piden el fin de la presidencia de Jovenel Moise, empresario bananero que llegó al poder bajo la égida del Partido Haitiano Tet Kale, como su predecesor Michel Martelly.
Sin embargo, su gestión es ampliamente criticada, y activistas políticos lo acusan también de estar implicado en el caso de malversación de fondos de Petrocaribe, programa energético de cooperación que debía atender las insuficiencias del país en materia energética, educacional, de infraestructura y salud.
Las protestas organizadas para este jueves demandan además la creación de un gobierno transitorio y la conformación de una Conferencia Nacional, así como la disminución de los precios de los productos de primera necesidad.
Mientras el mandatario reitera su postura de diálogo e instala un comité facilitador para este proceso, la oposición se mantiene firme en su negativa de entablar negociaciones con la actual administración.
Para el excandidato presidencial, Chavanne Jean Baptiste, el tiempo de diálogo ya terminó, aunque alerta que es momento de buscar nuevas alternativas para la dirección del país.
Las protestas deben llegar a varias ciudades de Haití, en tregua desde hace unas semanas, luego que el 7 de febrero estallara un movimiento de movilizaciones que mantuvo paralizada a la capital y otras ciudades.
De acuerdo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, al menos 26 personas murieron y otras 77 resultaron heridas, aunque la oposición de Haití sostiene que fueron unos 50 fallecidos y cientos de heridos.
La operación, llamada por sectores contrarios Bloqueo del País, también afectó los servicios básicos como el suministro de agua, electricidad y el acceso a la salud, aunque no logró la renuncia de Moise, quien cuenta con el apoyo de la comunidad internacional y un sector de la oligarquía.