Tras la proclamación de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela por los próximos seis años y el rompimiento de las relaciones diplomáticas con República Dominicana, un grupo de venezolanos decidieron realizar una vigilia en el consulado de su país en territorio dominicano.
La concentración comenzó con seis personas y según avanzan las horas han llegado más de 50 venezolanos tras la convocatoria de sus paisanos y se esperan más.
«Venezuela libre», «queremos libertad», es el grito de impotencia de los suramericano, quienes aseguran que las elecciones fueron fraudulentas.
La zona es resguardada por agentes de la Policía que protegen tanto a los manifestantes como el edificio diplomático. En principio el grupo comenzó un cacerolazo y cambió su método de protesta para no causar molestias a los residentes del sector Mirador Sur, lugar donde está ubicado el consulado.
Al entrar la noche realizaron un encendido de velas y elevaron una oración a Dios.