Santiago.-El transportista Juan Marte sugirió al presidente Danilo Medina, afianzar las inversiones en Santiago y de ese modo impulsar el desarrollo sostenible de la socieda.
Marte, quien es presidente de la Central Nacional de Trabajadores del Transpore (CNTT), abogó por programas y construcciones de obras se expandan a las demás localidades que conforman la fértil región Norte.
«Santiago requiere que el mandatario continúe poniéndole atención, con la ejecución de políticas sociales y económicas que contribuyan con la solución de los probles que afectan a la colectividad», afirmó Marte.
En torno al sector transporte, el máximo líder de la CNTT estableció que urge superar la problemática vial, lo que implica la interverción en las avenidas Estrella Sahdalá, Luperón, Argentina, Padre la Casa, Buena Vista y la Rotonda de La Fuente.
Asimismo, reclamó la reparación de las oficinas públicas Gran Teatro del Cibao, Palacio de Justicia y el edificio Antonio Guzmán Fernández, en el cual funcionan las dependencias de las instituciones estatales.
Marte reconoció la voluntad política por parte del Gobierno Central para seguir remozando y embelleciebdo a Santiago, y ejemplo de esto se expresa en el asfaltado de las calles y avenidas, pero esas obra estarían inconclusas si no se procede a resolver las dificultades viales.
«Solo el Ministerio de Obras Públicas logró efectuar labores significativas, porque cuenta con los recursos y las autoridades tiene la vocación de trabajar en favor de la comunidad», precisó.
Marte se pronunció en esos términos durante la exitoda jornada, la cual se basó en paros escalonados y el estacionamiento a la derecha de mil 500 unidades de carros por espacio de dos horas.
«La suspensión del servicio lo cristamizamos después de trasladar a los estudiantes a escuelas, colegios y universidades, así como a los trabajadores a los centros de producción, porque jamás vamos a perjudicar al pueblo», argumentó.
De acuerdo a Marte, la CNTT decidió asumir la defensa de los derechos de los choferes, que se aplique la Ley de Migración y que cesen los niveles de confrontación de la Alcaldía de Santiago con los transportistas y la ciudadanía, con la creación de espacios para el diálogo y la gobernanza.