El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, dijo el jueves que la decisión del gobierno en disputa de Nicolás Maduro de expulsar al embajador alemán es inaceptable y no cambiará la posición de su país de apoyar al presidente encargado, Juan Guaidó.
El canciller de Maduro, Jorge Arreaza, declaró el miércoles persona non grata al embajador alemán Daniel Kriener, y ofreció 48 horas para que abandone el país por lo que catalogó como «recurrentes actos de injerencia».
En declaraciones el jueves, Maas dijo que el gobierno alemán continuará respaldando el plan de Guaidó para organizar elecciones libres en Venezuela.
Maas explicó la posición alemana junto a su contraparte de Croacia, Marija Pejčinović Burić.
«Respecto a la decisión del gobierno (en disputa) venezolano, o más bien del régimen de (Nicolás) Maduro en Caracas, de expulsar al embajador Kriener como persona non grata, es para nosotros una decisión totalmente incomprensible e inaceptable», dijo.
Maas dijo que Kriener llegará a Alemania el sábado.
«Discutiremos la situación con él nuevamente. Esto no significará en modo alguno que reconsideremos nuestro apoyo a Juan Guaidó como presidente interino con el trabajo de organizar elecciones libres, justas y democráticas. Este apoyo Es irrevocable y seguirá siéndolo», enfatizó.
Tras el anuncio de su expulsión, Kriener dijo que Maduro «carece de la legitimidad democrática necesaria».
Kriener fue uno de varios embajadores occidentales que estuvieron presentes para observar el regreso de Guaidó a Caracas la pasada semana, después de una gira por países como Colombia, Brasil, Argentina, Paraguay y Ecuador.
Su regreso ocurrió en medio de temores de que fuera detenido debido a que sobre él pesa una orden que le prohíbe salir al extranjero.
Guaidó entró al territorio venezolano en un vuelo comercial sin dificultades.
«Creo que la presencia de varios embajadores contribuyó a evitar un arresto (de Guaidó). Un día después lo llamé (embajador alemán Kriener) para agradecerle personalmente», dijo Maas.
Además dijo que el objetivo de Alemania «es contribuir a una solución pacífica, que la ayuda humanitaria que necesita la gente de Venezuela finalmente llegue a ellos y que haya un proceso democrático con una elección en la que los ciudadanos de Venezuela puedan decidir por sí mismos».
El gobierno en disputa de Venezuela acusa a naciones como Estados Unidos y Alemania de estar interrumpiendo la democracia en Venezuela y de haber fraguado un intento de golpe de Estado.
Varios países del mundo sostienen que Maduro ha «usurpado» el poder a través de elecciones fraudulentas que lo llevaron a iniciar un segundo mandato el pasado 10 de enero.
La UE dijo el miércoles que espera que Venezuela «reconsidere» su decisión de expulsar al embajador alemán.
Pero Arreaza respondió en Twitter: «Venezuela espera que la Unión Europea recupere el EQUILIBRIO y RECONSIDERE sus posiciones de permanente interferencia en nuestros asuntos internos, su clara alineación con la estrategia de agresión de Washington y su apoyo a los actos inconstitucionales de la oposición extremista».
Países europeos apoyan a Guaidó, que se proclamó presidente interino el pasado 23 de enero y desde entonces busca sin éxito hasta ahora el apoyo de los militares para avanzar en su agenda que incluye la eventual realización de nuevas elecciones.