El Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís condenó a la máxima pena, 30 años de prisión, a Marlon Martínez y a su madre, Marlin, a cinco años por la muerte de la menor Emely Peguero en agosto del 2017.
Los jueces María de los Ángeles Concepción, Víctor Inoa y Carminia Caminero hallaron culpable a Marlon de homicidio voluntario, acto de barbarie y sustracción de menores.
En tanto que a Marlin Martínez solo se le halló culpable de la sustracción de la menor cuando la sacó de su casa, acudiendo al engaño para llevarla a hacerle unos análisis para confirmar que estaba embarazada, así como el de ocultamiento del cadáver. Fue absuelta de la acusación de complicidad debido a que, según los jueces del tribunal, existe complicidad si es desde antes de cometerse el crimen, no después de que este haya ocurrido.
El cuerpo de Emely Peguero fue hallado casi en descomposición la noche del 31 de septiembre del 2017, en la provincia Espaillat después que desapareciera el día 19 de ese mismo mes, cuando salió de su residencia, ubicada en Cenoví, provincia de San Francisco.